Vespa fue fundada justo después de la Segunda Guerra Mundial en Italia, lugar de nacimiento de su creador Enrico Piaggio. Enrico poseía una industria dedicada al diseño aeronáutico, Piaggio & Co., una vez terminada la gran guerra, decidió crear Vespa para producir motocicletas robustas y baratas para un país que no atravesaba su mejor momento tras el conflicto bélico.
La red de carreteras italianas había quedado muy dañada por los bombardeos aliados, en muchas ocasiones era imposible desplazarse con un coche, de ahí que la gente para moverse utilizase una pequeña moto llamada Cushman. Dado el éxito de esta motocicleta, Piaggio & Co., comenzó a diseñar su modelo propio, un híbrido entre moto y bicicleta que resultase manejable, fácil de mantener y que no supusiese un elevado desembolso para los castigados bolsillos de los italianos.
El resultado fue la admirada y en algunos casos venerada Vespa. Con un diseño innovador que incluía una especie de escudo protector frontal para el piloto que le protegía de cualquier salpicadura y un motor con transmisión que permitía eliminar la dichosa cadena exterior. La Vespa muy pronto se hizo mundialmente famosa y ha sido y sigue siendo uno de los scooters con más éxito en el mundo.
El modelo que nos ocupa se diferenció del resto por su especie de maletero que permitía guardar una rueda de repuesto y alguno de los accesorios del piloto, como podían ser unos guantes.
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