

Este hermoso vehículo tiene una ligera carrocería construida a mano. Una de sus principales características es su parte delantera del tipo "pontón-guardabarros". Su denominación Testa Rossa lo debe a la particular pintura roja de la cabeza plana del motor de 12 cilindros. Esto luego sería aplicado a todos los motores de la marca Ferrari.
La puja realizada en la fábrica de la casa italiana en Maranello ha recogido el precio más caro por el que se ha pagado un automóvil en la historia: el monto que desembolsó el nuevo propietario es de 9.020.000 euros. El anónimo comprador tuvo que pelear con otros tres interesados, hasta que terminó por llevarse este maravilloso auto de colección. Su oferta monetaria fue realizada a través del teléfono.
A pesar de esta increíble suma, los organizadores del evento esperaban obtener por este automóvil una cantidad de dinero no menor a los doce millones de euros.
El anterior récord mundial en la venta de autos lo obtuvo un 250 GT SWB California Spyder, también de la firma Ferrari, por el cual se pagó la suma de 7.060.000 euros.
El negocio de las subastas de autos clásicos se ha convertido en una auténtica forma de ganar mucho dinero para todas las partes involucradas, menos, claro está, para el flamante comprador. Pero para las personas que manejan estas cifras millonarias y se dan el lujo de pagar estas sumas impresionantes de dinero, la compra de uno de estos espectaculares autos de colección es una adquisición invalorable y una buena inversión, sobre todo para alimentar el ego.